martes, 20 de octubre de 2015

ESTRATEGIAS PARA LA ENSEÑANZA DE LA HISTORIA



Se cree que el proceso de enseñanza-aprendizaje de la asignatura de historia es más simple que otros, por ejemplo si es comparado con otros como el del Español o las Matemáticas por la naturaleza de sus contenidos, pero no estoy de acuerdo con ello ya que desde mi punto de vista, los contenidos de la historia son acontecimientos sociales y por esta razón no pueden volver a reproducirse así que no hay manera de que el niño compruebe su veracidad y de esta manera comprenda totalmente dicho hecho histórico.

Es por esto que en muchos casos se reduce la enseñanza de la historia a la descripción de algunos sucesos trascendentes del pasado, conocer en que fechas sucedieron o conocer la biografía de algún personaje destacado dentro de dicho hecho.

Esto trae en consecuencia que los alumnos, además de tener exclusivamente representaciones anecdóticas y personalistas de los hechos históricos, presenten una gran confusión en la determinación real del momento histórico y de la participación de la humanidad en el mismo.

La comprensión de la historia no solo compete conocer fechas históricas ni quienes participaron en ella, consiste en eso y más; por ejemplo conocer las causas que propiciaron que sucediera ese acontecimiento, las repercusiones que tuvo en su época, como se relaciona y que impacto tiene en nuestra vida cotidiana.

Por lo tanto para que los alumnos lleguen a esa comprensión deberían de viajar en la máquina del tiempo y trasladarse al pasado, esta sería una forma sencilla de que los niños comprendieran los hechos históricos y no los vieran ajenos a su realidad. Así que a falta de dicha máquina es compromiso del profesor adentrarlos al estudio de la historia a través de diversas dinámicas para hacer las clases más amenas e interesantes para los niños.
“El estudiante tiene que apropiarse de lo histórico-cultural, del conocimiento que ya otros descubrieron; la institución educativa existe para lograr la socialización, el profesor existe para dirigir el proceso pedagógico, para orientar y guiar al estudiante, no para hacer lo que debe hacer éste.”(Maldonado, 2001)

Los niños presentan dificultades en el entendimiento de todo aquello que les está alejado en el espacio y en el tiempo. De esta forma, los niños comprenden la historia como elementos aislados, como acontecimientos desconectados. La noción del tiempo implica una dificultad cuando para ellos lo importante es lo inmediato y presente.

El niño requiere conocer una serie de hechos para formar su representación del mundo social. Además su conocimiento de estos hechos debe ser organizado y cobrar un sentido. El niño normalmente pasa de concebir elementos aislados sin conexión a ir formando nociones en las que es posible distinguir a la sociedad como una multiplicidad de sistemas que están en interacción y lo que sucede en algunos de ellos influye en los demás.

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