BREVE
HISTORIA DE LA CIVILIZACIÓN
Eduardo
Galeno Espejos. Una historia casi
universal
Y nos cansamos de andar vagando
por los bosques y las orillas de los ríos.
Y nos fuimos quedando.
Inventamos las aldeas y la vida en comunidad, convertimos el hueso en aguja y
la púa en arpón, las herramientas nos prolongaron la mano y el mango multiplicó
la fuerza del hacha, de la azada y el cuchillo.
Cultivamos el arroz, la
cebada, el trigo y el maíz, y encerramos en corrales las ovejas y las cabras, y
aprendimos a guardar granos en los almacenes, para no morir de hambre en los
malos tiempos.
Y en los campos labrados
fuimos devotos de las diosas de la fecundidad, mujeres de vastas caderas y
tetas generosas, pero con el paso del tiempo ellas fueron desplazadas por los
dioses machos de guerra. Y cantamos
himnos de alabanza a la gloria de los reyes, los jefes guerreros y los altos sacerdotes.
Y descubrimos las palabras
tuyo y mío y la tierra tuvo dueño y la mujer fue propiedad del hombre y el
padre propietario de los hijos.
Muy atrás habían quedado los
tiempos en que andábamos a la deriva, sin casa ni destino.
Los resultados de la civilización
eran sorprendentes: nuestra vida era más segura pero menos libre, y
trabajábamos más horas.
POSICIONAMIENTO ANTE EL
OBJETO DE ESTUDIO:
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