MUTISMO SELECTIVO

MUTISMO SELECTIVO

José es un niño de 10 años de edad que cursa el sexto grado de educación primaria. José es un niño que padece de mutismo selectivo, debido que en el salón de clase no habla ni cuando se le indica y en los recreos y fuera de la escuela si lo hace. Cuando se le indica que conteste algo, o lea sobre sus escritos solamente se queda parado, cambia de color y comienza a hacer gestos con su cara, y no dice nada, pueden pasar varios minutos y el niño se queda en silencio.

El ritmo de trabajo de José es igual que el de todos sus compañeros, termina rápido sus trabajos y son de calidad, solo que le cuesta trabajo expresarse oralmente. En las actividades en equipo, muestra disposición y colabora para completar el trabajo, pero en una ocasión en la que les tocaba exponer, al decir de sus compañeros de equipo, apoyo en la elaboración de una maqueta, pero prefirió abandonar el equipo antes de exponerlo.

En los recreos se reúne con sus compañeros para jugar, forma parte del equipo de fútbol y da órdenes y grita, pide la pelota y regaña a sus compañeros si se equivoca, en una ocasión protagonizó un conflicto con uno de sus compañeros, a quién hizo llorar, José toma la iniciativa, busca a su compañero, le pide una disculpa y se abrazan. En ocasiones que esta distraído o jugando en el salón, la maestra le llama la atención y el solo se pone cono nervioso y hace gestos con la cara.

Últimamente, se ha estado acercando a mí al momento de que le resuelvo alguna duda,  y en una apertura de clase levanto la mano y aportó su comentario en una palabra, le dije muy bien José y seguimos adelante, además en las actividades de lectura, en la última semana ha estado participando por su propia cuenta y al momento que lo hace sus compañeros le aplauden porque les resulta sorpresivo que hable.

Olivares (2007) define al mutismo selectivo como “Trastorno de conducta que inicia en la infancia y cuya característica es que los niños que lo presentan evitan de manera persistente el habla en situaciones sociales específicas y que progresivamente pueden irse generalizando hasta el mutismo total”. Por ello es indispensable detectarlo y tratarlo a tiempo para mejorar la calidad de vida del alumno.

Para poder intervenir en la problemática del educando mencionado, se considera indispensable indagar, conocer y utilizar elementos del contexto escolar, familiar y social del educando, para poder establecer acciones de intervención que favorezca el seguimiento de la problemática, esta indagación se muestra a continuación en la siguiente fase del proyecto.